CAÍDO DEL ZARZO
Un libro y una carta
Elkin Obregón S.
El libro es Recuerdos míos, de Isabel García Lorca, hermana menor del poeta. El primer capítulo se abre con una foto memorable: Federico, de unos diecisiete años, enseña a leer música a Isabel, de cinco, cuyos ojos parecen querer tragarse el mundo. La obra está llena de pinceladas, muy finas y muy agudas, sobre las personas que integraron o rodearon esa familia, y también sobre su entorno granadino. Isabel, ya radicada en Madrid después de la diáspora, visita la Granada que tanto amó, y la encuentra ajena. No solo el hachazo de la guerra, sino también el del tiempo, le cobraron ese nuevo desarraigo.
La carta (1960) es la que escribió a Isabel su amiga Marguerite Yourcenar, después de un viaje a Granada, y tras haber visitado Víznar, el sitio donde asesinaron a Federico los soldados nacionales. No cabe aquí la carta entera, por desgracia, pero este párrafo (el penúltimo) lo resume todo, o casi todo:
“Lo que yo querría sobre todo expresarle es que, al abandonar aquel lugar que nos designaron (y estas reflexiones son válidas aunque solo fuera aproximadamente exacto), yo me volví para contemplar aquella montaña desnuda, aquel suelo árido, aquellos pinos jóvenes creciendo vigorosos en la soledad, aquellos grandes plegamientos perpendiculares del barranco por donde debieron de discurrir antaño los torrentes de la prehistoria, Sierra Nevada perfilándose majestuosa en el horizonte; y me dije a mí misma que un lugar como aquél hace vergonzante toda la pacotilla de mármol y de granito que puebla nuestros cementerios, y que cabe envidiar a su hermano por haber comenzado su muerte en aquel paisaje de eternidad. Créame que al escribir esto, no trato de minimizar el horror de su prematuro fin, ni lo tremendamente angustioso que sería (al menos para mí) tratar de reconstruir aquella escena que sucedió allí, en un determinado instante del tiempo, y cuyos pormenores no llegaremos a conocer jamás. Pero es cierto que no cabe imaginar más hermosa sepultura para un poeta”.
P.D. Isabel García Lorca murió en el 2002, de 92 años. No llegó a conocer este libro con notas que escribió, dictó y recordó. No hay odio en estas páginas, dedicadas al amor.
2ª P.D. Para leer la carta completa (y vale la pena), consultar el volumen Marguerite Yourcenar, cartas a sus amigos, traducción de María Prieto Barral, Alfaguara, 2000.
CODA
La cantante Martina La Peligrosa es muy joven, muy bella, y es costeña hasta los tuétanos. Ofrece en Youtube sus “Lecciones de idioma cordobés”; son más de treinta, y las envidiaría cualquier etnolingüista. Una palabra imposible, indigna de Martina.