Rubias, morenas, pelirrojas. Nuevitas en la zona. Solo Diosas. Dos por una. La oferta sexual abunda por todo Buenos Aires en forma de papelitos. Basta con darse una caminada por Callao entre las avenidas Rivadavia y Corrientes para llenarse los bolsillos de volantes triple equis. Fotos 100% reales. Solitas en su departamento. Flaquitas y pulposas que te tratan como a su enamorado. Aunque es un fenómeno de toda la urbe, en el centro y microcentro bonaerense es donde se concentra el mayor movimiento publicitario.
Muchos volantes son entregados en la mano, pero es común ver a los tipos que los reparten frente a los teléfonos públicos: en poco tiempo convierten las cabinas en pedestales de placer y lujuria. Muy concentrados, acomodan los papelitos de manera simétrica, con una "prolijidad" enfermiza. Pero no solo los teléfonos. Toda rendijita en un poste, una reja, un paradero de bus, un cartel, una señal de tránsito, una puerta es utilizada para acomodar un volante que ofrece sexo. Morochas complacientes y ratoneras. Tu mejor compañía.
Rodea este texto una muestra de papelitos recolectados durante el invierno y la primavera de 2011 en la capital argentina. Según la ley 260 de este país, los volantes entregados en mano no deben arrojarse en vía pública, así que fue en mis bolsillos y los de mi morral donde se gestó esta colección. Bienvenido. Ambiente climatizado. Bucal completo hasta el fin.
1 dólar: 3,8 pesos argentinos.