Número 16 - Septiembre de 2010
La serie Clausurado, de Víctor Muñoz, se encarga de componer arquitecturas falsas, espacios imposibles que van dejando el abandono, la demolición, la disputa de un territorio. Recortar, repetir, organizar una colección de muros tapiados, inventar dos callejones, juntar varias esquinas peligrosas es una forma de resaltar un escenario de posguerra. En ocasiones la redundancia del espejo puede entregar una visión reveladora. Por separado, las ventanas enladrilladas son la simple anécdota de una casa en proyecto de obra. Pero cuando se reúnen ya parecen fortalezas improvisadas, murallas que han repelido a sus enemigos y al mismo tiempo han terminado derrotadas.